Si el amor, como todo es cuestión de palabras, acercarme a tu cuerpo fue crear un idioma.

"Deslizaba sus manos con suspicacia hacia mi espalda. Digamos que hacia unas especies de dibujos o siluetas por toda la parte de atrás de mi cuerpo: a veces hacia números y otras, intentaba escribirme frases que tenían que averiguar mi intuición o subconsciente.

Era una habitación oscura y sin nada ni nadie que nos molestase, solo había una lámpara de neón que nos iluminaba nuestros dos torsos desnudos por aquella entrega de amor. Él me dijo que me quería pero, '¿a cuántas más le dijo esa misma milonga?', pensé. Pero yo sabía que todo lo que sentía, nunca lo había sentido por otras mujeres, porque en su mirada todo lo delataba. Y también os puedo jurar que él me sonreía, y cuando hacía eso, juraría que era como si estuviera en el cielo, porque nunca había visto una sonrisa tan preciosa como la de aquel hombre. No importa el cómo sonreía y por qué sonreía, porque os puedo asegurar que su único motivo por el que sonreía, era por el momento, no por mi. El momento de estar tan entregados, de estar unidos sin importarnos el tiempo que pasábamos allí en aquella habitación, de abrazarnos en silencio, de querernos a gritos. De ser uña y carne, de besarnos con ganas, de acariciarnos con amor. De que el amor dicen que no existe, pero yo os prometo que cuando amáis a una persona así, os puedo asegurar que eso es amor y no las tonterías que decís muchos. "

We are the only exception for me.

Sabes... yo también sé por qué te quiero.

Te quiero porque haces las cosas fáciles.  Porque si tuviera que elegir un sitio para vivir, sería tu cuarto. 
Porque debajo de tu cama, el mundo es tan pequeño, que parece que no puede pasar nada más, y a mi no me hace falta que pase algo más, si estoy contigo. Te quiero.

Sueñame más, olvidame menos.

Te conocí y con una sola mirada, se me volcó el corazón.

Quede tonta por tu culpa, es cierto, pero de esto ya ha pasado tiempo, que no quiere decir que ya te haya olvidado, porque la palabra olvidar es muy difícil para mi, es más, no entra en mi vocabulario, ni entrará, eso te lo garantizo.
Tus ojos verdes me cautivaron, tu sonrisa me enamoro. Todo me envolvió directamente hacia ti. Estuve mucho tiempo pensando, pero creo que no he dejado de pensar, que para mi alma y mi corazón, aún existes.
Hoy escribo todos los pensamientos que se me pasaron por la cabeza y hay uno, que me marea constantemente en mi interior y que no para de dar vueltas "¿se volverá a repetir lo que paso esa última noche?". Pero intento eliminarlo de mi mente, ya que las ilusiones no son buenas para nadie.
Que por más que el corazón quiera, uno no puede, si uno de los dos no quiere.

Utopía, algo idealizado como alternativo a la realidad.

Cambios de humor, estados de ánimo. De estas veces que quieres desaparecer del mapa, pero quieres que te recuerden los tuyos. Que te entran unas ganas inmensas de comerte el mundo, y de otras, que prefieres que el mundo te coma a ti. De no salir de la cama un lunes por la mañana y no despertarte, y de otras, que te despiertas antes de tiempo y quieres salir de esa cómoda cama donde descansas y sueñas cosas utópicas, a lo que se suele llamar como sueños utópicos... sueños que nunca van a suceder, que nunca se van a hacer realidad. El concepto de utopía suele llamarse como algo "idealizado", un mundo imaginario que se presenta como alternativo a la realidad.

¿Merece la pena esperarte?

Vivimos en un mundo en el que no hay cura para el dolor sentimental. Quizás, la cura es el tiempo.
El tiempo es lo único que calma todo. Cuando una persona nos dice "Dame tiempo", pueden significar dos cosas: No lo tiene claro o simplemente, es que quiere conocer a otras personas... Pero cuando te lo dice de corazón, cuando quiere que estés ahí porque no te quiere perder por nada en absoluto, es cuando te planteas la opción de seguir hacia delante, hacer todo lo posible y lo mejor para que esa persona esté a tu lado. Pero las personas nos cansamos, decidimos "retirarnos de la partida", decidimos no esperar más, porque la paciencia se nos agota. La esperanza es lo último que se pierde, pero realmente se pierde...
Y piensas "¿Valdrá la pena esperarte?", esa pregunta te la haces constantemente en tu cabeza. Y ahora mismo, me la planteo yo si merece la pena esperarte.

Nunca hubo un adiós, fue una pausa entre tú y yo.

Apareciste en un momento tan inesperado y casual, hiciste de algo pequeño, algo tan intenso. Siempre se dice que el físico atrae y la personalidad enamora, pues bien, todo eso me gusto de ti. Te marchaste sin decir la palabra "Adiós", rápido y sin previo aviso. Y ahora me quedas con las manos vacías, sin aliento y imaginando lo que pudo haber sido todo aquello... La distancia es lo único que nos preocupa, por todo lo demás, hacemos como si no existiese, como si nada nos preocupase. Aquí tienes un hueco en este pequeño corazón, que se saldrá conforme te vaya olvidando poco a poco. Pero aunque esta distancia nos separe, nunca hubo un adiós, solo fue una pausa entre tú y yo.