lunes, 29 de agosto de 2011

Guardo tu perfume a miel, tus besos de caramelo.

En uno de los rincones de mi habitación, tengo una caja pequeña con forma cuadrada y un dibujo en medio, algo parecido a un corazón. En esa caja, guardo todos los sueños y todas las tristezas que abundan mi ser. Guardo el día que te conocí, el primer beso que te di y el recuerdo del amargo adiós que recibí. Guardo tu imagen, tu mirada de ojos marrones y tus caricias. También guardo un pequeño trozo de corazón que me quedaste al saber que te irías lejos de mí, que no volverías y que no me verías más... pero sé que no es cierto eso que me dijiste en su día, porque sé que te veré, que estarás lejos pero que te noto tan cerca, como si te pudiese tocar en lo más profundo de tu corazón...


1 comentario: